Los amigos son “colores” cada uno con su matiz
Y una manera de ser bien definida.
AMIGO “VERDE”
Es aquel que en todo resalta la belleza de la vida
Y pone esperanza en ella.
AMIGO “AZUL”
El siempre trae palabras de paz y serenidad
Dándonos la impresión al oírlo
De que estamos en contacto directo con el cielo o con el mar.
El nos eleva!
AMIGO “AMARILLO”
El nos entibia, así como el sol
Nos hace reír, sonreír y encontrar
en que el brillo de las estrellas está bien
al alcance de nuestras manos.
AMIGO “ROJO”
Es aquel que domina las reglas del vivir,
Es como nuestra sangre.
Nos indica el peligro mas nunca nos quita el coraje.
Es pródigo en palabras apasionadas y repletas de caluroso amor.
AMIGO “NARANJA”
Nos trae la sensación de vigor y salud.
Enriquece nuestro espíritu con energía
que son verdaderas vitaminas para nuestro crecimiento.
AMIGO “GRIS”
Nos ensena el silencio, internalización y el autoconocimiento.
Es un inductor a pensamientos y reflexiones.
Nos ayuda a profundizar en nosotros mismos.
AMIGO “VIOLETA”
Trae a tono nuestra esencia majestuosa
Sus palabras tienen nobleza, autoridad y sabiduría.
AMIGO “NEGRO”
El es maestro en mostrar nuestro lado más oscuro de nuestras vidas
con palabras generalmente duras.
Nos dice la verdad ‘sin anestesia”
y con buenas intenciones nos lleva a considerar
mejor nuestra actitud frente a la vida.
AMIGO “BLANCO”
Nos revela verdades nacidas de la vivencia y de la
adquisición de conocimientos.
El nos prueba que no solo el sino también
todos los demás tienen verdades aprendidas
para compartir con nosotros.
Cierto día, la profesora, queriendo saber si todos habían estudiado laLección solicitada, preguntó a los niños quién sabría explicar quién esDios.
Uno de los niños levantó el brazo y dijo:
- Dios es nuestro padre. El hizo la tierra, el mar y todo que está en ella; nos hizo como hijos de Él.
La profesora, queriendo buscar más respuestas, fue más lejos:
- ¿Como saben que Dios existe, si nunca Lo han visto?
La sala quedó toda en silencio.
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Pedro, un niño muy tímido, levantó la mano y dijo: - Mi madre me dijo que DIOS ES COMO EL AZÚCAR en mi leche que ella prepara todas las mañanas. Yo no veo el azúcar que está dentro de la taza en medio de la leche, pero si ella me lo saca, queda sin sabor.
Dios existe, y está siempre en el medio de nosotros, solo que no lo vemos.
Pero si Él no está, nuestra vida queda sin sabor.
La profesora sonrió y dijo:
- Muy bien, Pedro, yo les enseñé muchas cosas, pero tú me enseñaste algo más profundo que todo lo que yo ya sabía. Yo ahora sé que Dios es nuestro azúcar y que ESTÁ TODOS LOS DÍASENDULZANDO NUESTRA VIDA. Le dio un beso y salió sorprendida con la respuesta de aquel niño.
La sabiduría no está en el conocimiento, pero sí en la vivencia de DIOS
en nuestras vidas, pues teorías existen muchas, pero dulzura como la deDIOS no existe todavía, ni en los mejores azúcares.
Te deseo un excelente día y no te olvides de colocar 'AZÚCAR' en tu vida.
QUE DIOS TE BENDIGA Y ENDULCE SIEMPRE TU VIDA
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Rodrigo estaba haciendo fila para poder ir al aeropuerto; cuando un taxista se acercó, lo primero que notó fue que el taxi estaba limpio y brillante.
El chofer bien vestido con una camisa blanca, corbata negra y pantalones negros muy bien planchados, el taxista salió del auto dio la vuelta y le abrió la puerta trasera del taxi.
Le alcanzo un cartón plastificado y le dijo: yo soy Willy, su chofer. Mientras pongo su maleta en el portaequipaje me gustaría que lea mi Misión.
Después de sentarse, Rodrigo leyó la tarjeta: Misión de Willy:
El chofer bien vestido con una camisa blanca, corbata negra y pantalones negros muy bien planchados, el taxista salió del auto dio la vuelta y le abrió la puerta trasera del taxi.
Le alcanzo un cartón plastificado y le dijo: yo soy Willy, su chofer. Mientras pongo su maleta en el portaequipaje me gustaría que lea mi Misión.
Después de sentarse, Rodrigo leyó la tarjeta: Misión de Willy:
“Hacer llegar a mis clientes a su destino final de la manera mas rápida, segura y económica posible brindándole un ambiente amigable”
Rodrigo quedó impactado. Especialmente cuando se dio cuenta que el interior del taxi estaba igual que el exterior, ¡¡limpio sin una mancha!!
Mientras se acomodaba detrás del volante Willy le dijo, “Le gustaría un café? Tengo unos termos con café regular y descafeinado”. Rodrigo bromeando le dijo: “No, preferiría un refresco” Willy sonrió y dijo: “No hay problema
tengo un hielera con refresco de Cola regular y dietética, agua y jugo de naranja”. Casi tartamudeando Rodrigo le dijo: “Tomaré la Cola dietética”
Pasándole su bebida, Willy le dijo, “Si desea usted algo para leer, tengo el Tiempo, El Espectador, Semana y La Naciòn…”
Al comenzar el viaje, Willy le pasó a Rodrigo otro cartón plastificado, “Estas son las estaciones de radio que tengo y la lista de canciones que tocan, si quiere escuchar la radio”
Y como si esto no fuera demasiado, Willy le dijo que tenía el aire acondicionado prendido y preguntó si la temperatura estaba bien para él. Luego le avisó cual sería la mejor ruta a su destino a esta hora del día.
También le hizo conocer que estaría contento de conversar con él o, si prefería lo dejaría solo en sus meditaciones. ...
“Dime Willy, -le preguntó asombrado Rodrigo- siempre has atendido a tus clientes así?”
Willy sonrió a través del espejo retrovisor. “No, no siempre. De hecho solamente los dos últimos dos años. Mis primeros cinco años manejando los gasté la mayor parte del tiempo quejándome igual que el resto de los
taxistas. Un día escuche en la radio acerca del Dr. Dyer un “Gurú” del desarrollo personal. Él acababa de escribir un libro llamado “Tú lo obtendrás cuando creas en ello”.
Dyer decía que si tú te levantas en la mañana esperando tener un mal día, seguro que lo tendrás, muy rara vez no se
te cumplirá. Él decía: Deja de quejarte. Se diferente de tu competencia. No seas un pato. Sé un águila. Los patos solo hacen ruido y se quejan, las águilas se elevan por encima del grupo”.
“Esto me llego aquí, en medio de los ojos”, dijo Willy. “Dyer estaba realmente hablando de mí. Yo estaba todo el tiempo haciendo ruido y quejándome, entonces decidí cambiar mi actitud y ser un águila. Miré alrededor a los otros taxis y sus chóferes… los taxis estaban sucios, los chóferes no eran amigables y los clientes no estaban contentos. Entonces
decidí hacer algunos cambios. Uno a la vez. Cuando mis clientes respondieron bien, hice más cambios”.
“Se nota que los cambios te han pagado”, le dijo Rodrigo. “Si, seguro que si”, le dijo Willy. “Mi primer año de águila dupliqué mis ingresos con respecto al año anterior. Este año posiblemente lo cuadruplique.
Usted tuvo suerte de tomar mi taxi hoy. Usualmente ya no estoy en la parada de taxis. Mis clientes hacen reservación a través de mi celular o dejan mensajes en mi contestador. Si yo no puedo servirlos consigo un amigo taxista águila confiable para que haga el servicio”.
Willy era fenomenal. Estaba haciendo el servicio de una limusina en un taxi normal.
Posiblemente haya contado esta historia a más de cincuenta taxistas, y solamente dos tomaron la idea y la desarrollaron. Cuando voy a sus ciudades, los llamo a ellos. El resto de los taxistas hacen bulla como los patos y me cuentan todas las razones por las que no pueden hacer nada de lo que les
sugería.
Willy el taxista, tomó una diferente alternativa: Él decidió dejar de hacer ruido y quejarse como los patos y volar por encima del grupo como las águilas.
No importa si trabajas en una oficina, en mantenimiento, eres maestro, un servidor publico,"político", ejecutivo, empleado o profesionista, ¿Cómo te comportas? ¿Te dedicas a hacer ruido y a quejarte? ¿Te estás elevando por
encima de los otros?
Recuerda: ES TÚ DECISIÓN Y CADA VEZ TIENES MENOS TIEMPO PARA TOMARLA
Atentamente,
Un pato dispuesto a ser águila... q' pases un feliz día
Rodrigo quedó impactado. Especialmente cuando se dio cuenta que el interior del taxi estaba igual que el exterior, ¡¡limpio sin una mancha!!
Mientras se acomodaba detrás del volante Willy le dijo, “Le gustaría un café? Tengo unos termos con café regular y descafeinado”. Rodrigo bromeando le dijo: “No, preferiría un refresco” Willy sonrió y dijo: “No hay problema
tengo un hielera con refresco de Cola regular y dietética, agua y jugo de naranja”. Casi tartamudeando Rodrigo le dijo: “Tomaré la Cola dietética”
Pasándole su bebida, Willy le dijo, “Si desea usted algo para leer, tengo el Tiempo, El Espectador, Semana y La Naciòn…”
Al comenzar el viaje, Willy le pasó a Rodrigo otro cartón plastificado, “Estas son las estaciones de radio que tengo y la lista de canciones que tocan, si quiere escuchar la radio”
Y como si esto no fuera demasiado, Willy le dijo que tenía el aire acondicionado prendido y preguntó si la temperatura estaba bien para él. Luego le avisó cual sería la mejor ruta a su destino a esta hora del día.
También le hizo conocer que estaría contento de conversar con él o, si prefería lo dejaría solo en sus meditaciones. ...
“Dime Willy, -le preguntó asombrado Rodrigo- siempre has atendido a tus clientes así?”
Willy sonrió a través del espejo retrovisor. “No, no siempre. De hecho solamente los dos últimos dos años. Mis primeros cinco años manejando los gasté la mayor parte del tiempo quejándome igual que el resto de los
taxistas. Un día escuche en la radio acerca del Dr. Dyer un “Gurú” del desarrollo personal. Él acababa de escribir un libro llamado “Tú lo obtendrás cuando creas en ello”.
Dyer decía que si tú te levantas en la mañana esperando tener un mal día, seguro que lo tendrás, muy rara vez no se
te cumplirá. Él decía: Deja de quejarte. Se diferente de tu competencia. No seas un pato. Sé un águila. Los patos solo hacen ruido y se quejan, las águilas se elevan por encima del grupo”.
“Esto me llego aquí, en medio de los ojos”, dijo Willy. “Dyer estaba realmente hablando de mí. Yo estaba todo el tiempo haciendo ruido y quejándome, entonces decidí cambiar mi actitud y ser un águila. Miré alrededor a los otros taxis y sus chóferes… los taxis estaban sucios, los chóferes no eran amigables y los clientes no estaban contentos. Entonces
decidí hacer algunos cambios. Uno a la vez. Cuando mis clientes respondieron bien, hice más cambios”.
“Se nota que los cambios te han pagado”, le dijo Rodrigo. “Si, seguro que si”, le dijo Willy. “Mi primer año de águila dupliqué mis ingresos con respecto al año anterior. Este año posiblemente lo cuadruplique.
Usted tuvo suerte de tomar mi taxi hoy. Usualmente ya no estoy en la parada de taxis. Mis clientes hacen reservación a través de mi celular o dejan mensajes en mi contestador. Si yo no puedo servirlos consigo un amigo taxista águila confiable para que haga el servicio”.
Willy era fenomenal. Estaba haciendo el servicio de una limusina en un taxi normal.
Posiblemente haya contado esta historia a más de cincuenta taxistas, y solamente dos tomaron la idea y la desarrollaron. Cuando voy a sus ciudades, los llamo a ellos. El resto de los taxistas hacen bulla como los patos y me cuentan todas las razones por las que no pueden hacer nada de lo que les
sugería.
Willy el taxista, tomó una diferente alternativa: Él decidió dejar de hacer ruido y quejarse como los patos y volar por encima del grupo como las águilas.
No importa si trabajas en una oficina, en mantenimiento, eres maestro, un servidor publico,"político", ejecutivo, empleado o profesionista, ¿Cómo te comportas? ¿Te dedicas a hacer ruido y a quejarte? ¿Te estás elevando por
encima de los otros?
Recuerda: ES TÚ DECISIÓN Y CADA VEZ TIENES MENOS TIEMPO PARA TOMARLA
Atentamente,
Un pato dispuesto a ser águila... q' pases un feliz día
Enséñame a hacer tu voluntad, porque tu eres mi Dios,
tu espiritu bueno me guie a tierra de rectitud.Salmo 143:10
Un día le pedí a Dios instrucciones para vivir en esta tierra...
Dios acercó su voz a mi oído y me dijo:
Sé como el sol:
Levántate temprano y no te acuestes tarde.
Levántate temprano y no te acuestes tarde.
Sé como la luna, brilla en la oscuridad pero sométete a la luz mayor.
Sé como los pájaros, come, canta, bebe y vuela.
Sé como las flores, Enamoradas del sol, pero fieles a sus raíces
Sé como el buen perro obediente, pero nada más a su Señor.
Sé como la fruta, Bella por fuera, saludable por dentro.
Sé como el día, Que llega y se retira sin alardes
Sé como la luciérnaga, Aunque pequeña emite su propia luz.
Sé como el oasis, Da tu agua al sediento.
Sé como el agua, Buena y transparente.
Sé como el río, Siempre hacia adelante.
Y por sobre todas las cosas, Sé como el cielo: La morada de Dios
Señor, no permitas que me quede donde estoy. Ayúdame a llegar a donde tú esperas que llegue.
Que instruccion aprendiste hoy?
DIOS te guarde siempre
Cuando dices:... “No puedo resolver las cosas...”
Cuando dices: “No merezco perdón...”Dios te dice “Yo te perdono” (1° Juan 1:9 – Romanos 8:1)
Cuando dices: “Estoy muy cansado...” Dios te dice “Yo te haré descansar” (Mateo 11:28-30)